En este Día de Conmemoración de los Trabajadores Caídos recordamos a todos aquellos que han fallecido en sus lugares de trabajo. Ningún trabajador debe estar expuesto a lesiones fatales y a enfermedades en sus lugares de trabajo. Sin embargo, cada día 150 trabajadoras y trabajadores fallecen en sus lugares de trabajo debido a lesiones o a una enfermedad ocupacional. Sus muertes nos recuerdan que, todavía en el 2015, los estadounidenses enfrentan grandes peligros en sus lugares de trabajo.
Mi abuelo, mi padre, y yo hemos trabajado como mineros en las minas de carbón, y sé muy bien lo que es el miedo y la incertidumbre de no saber si tú o una persona a quien quieras volverá a casa sana y saludable después de su jornada de trabajo.
Mientras estamos de duelo por los trabajadores que han fallecido mientras realizaban su labor, es nuestro deber recordar y luchar por los vivos. Este febrero pasado nuestros hermanos y hermanas del sindicato de Trabajadores Metalúrgicos Unidos (United Steel Workers) se declararon en huelga para llamar la atención sobre la necesidad de establecer regulaciones más estrictas para la seguridad laboral en las refinerías de todo el país. Cuando se encontraban en huelga, hubo una explosión en una refinería de Exxon Mobile en el estado de California que dejó a cuatro trabajadores heridos e impactó a vecindarios que se encontraban varias millas a la redonda. Este incidente fortaleció el caso para que las corporaciones hagan más por mejorar la seguridad en las refinerías.
También tenemos una gran apreciación por la labor realizada por los trabajadores del sector de la salud durante la crisis del Ébola, tanto en el exterior como dentro del país. Cientos de estos trabajadores cuidaron a los enfermos y, debido a procesos de protección de bajos estándares ofrecidos por sus empleadores, muchos se contagiaron de esta enfermedad. Ninguna persona que ofrece un servicio comunitario debería arriesgar su vida, simplemente, porque su empleador no le ofreció un equipo de protección efectivo.
Hemos alcanzado grandes avances en lograr que los lugares de trabajo sean más seguros, pero todavía hay demasiados trabajadores tanto en Estados Unidos como alrededor del mundo que continúan siendo lesionados o fallecen en su lugar de trabajo. Hoy, y cada día que pase, debemos hacer lo posible para lograr lugares de trabajo seguros para todos los trabajadores y demandar que los legisladores apoyen la creación de buenos trabajos que aseguren la dignidad y la seguridad que cada trabajador se merece.
Contacto: Gonzalo Salvador (202) 637-5018