Press Release | Workplace Health and Safety

“Una crisis nacional”: Revela nuevo reporte de la AFL-CIO que 879 latinos murieron en sus lugares de trabajo durante el 2016

Aunque disminuye la tasa de muerte ocupacional para trabajadores latinos, sigue siendo más alta que la tasa de mortalidad  para todos los trabajadores

Ver el report aquí: https://aflcio.org/dotj

De acuerdo a un nuevo reporte presentado hoy por la AFL-CIO, la central sindical más grande de EE UU, los trabajadores latinos y los trabajadores inmigrantes latinos continúan teniendo un gran riesgo de fallecer en sus lugares de trabajo. En  2016, 879 trabajadores latinos murieron mientras laboraban, lo que significa una disminución de 903 muertes que ocurrieron en 2015. Este declive se debió en gran parte a que en ese periodo se puso más atención a programas enfocados en mejorar las condiciones laborales, especialmente para los trabajadores más vulnerables.

Pero mientras que el número y la tasa de muertes ocupacionales para los latinos disminuyó, su tasa de mortalidad permanece más alta que la tasa para todos los trabajadores. Esto resalta la importancia de mantener y expandir los programas de salud y seguridad, como las protecciones en los lugares de trabajo.

En general, 5,190 trabajadores estadounidenses fallecieron en sus lugares de trabajo en 2016. Esto significó un incremento comparado con las 4,836 muertes que ocurridas el año anterior. Otro estimado es que entre 50,000 a 60,000 personas murieron de enfermedades ocupacionales. Es decir, alrededor de 150 trabajadores fallecieron cada día en sus lugares de trabajo, debido a condiciones y peligros que son prevenibles. La tasa nacional de mortalidad ocupacional para todos los trabajadores incrementó a un 3.6 por 100,000 trabajadores de un 3.4 en 2015.

“Merecemos salir a nuestros lugares de trabajo sabiendo que reg resaremos sanos y salvos al finalizar la jornada laboral”, señaló Richard Trumka, presidente de la AFL-CIO, y miembro del sindicatos de Trabajadores Mineros Unidos de América (UMWA, por sus siglas en inglés). “Es una desgracia que la gente trabajadora tenga que seguir perdiendo la vida debido a la avaricia de las corporaciones. Las decisiones egoístas e irresponsables que se realizan en las juntas corporativas y en Washington están matando a la gente que ha construido este país. Esta es oficialmente una crisis nacional, que solo ha empeorado”.

El reporte titulado Muerte en el Trabajo: El Resultado de la Negligencia (Death on the Job: The Toll of Neglect) ha sido publicado por 27 años por la AFL-CIO. Aquí se han incluido los resultados sobre las protecciones de salud y seguridad para los trabajadores en Estados Unidos.

Este reporte muestra que en 2016, los estados con las tasas de mortalidad más altas fueron Wyoming (12.3 por 100,000 trabajadores), Alaska (10.6), Montana (7.9),  Dakota (7.5) y Dakota de Norte (7.0).

El número de trabajadores inmigrantes fallecidos en sus lugares de trabajo incrementó de 943 en 2015 a 970 en 2016 - el más alto desde 2007. Los cuatro estados con el mayor número de muertes de trabajadores inmigrantes en 2016 fueron Texas (156), California (151), Florida (104) y Nueva York (62).

En la industria de la construcción ocurrió el mayor número de muertes de trabajadores inmigrantes. En este sector fallecieron 270 trabajadores inmigrantes de un total de 970. Un 71% de estas muertes fueron de trabajadores inmigrantes que laboraban para contratistas especializados. La industria del transporte fue responsable por la muerte de 156 trabajadores inmigrantes. Específicamente un 72% de esta muertes ocurrieron en camiones.

Sorpresivamente, la violencia en los lugares de trabajo es ahora la segunda causa de muerte ocupacional, con 866 muertes, incluyendo 500 homicidios. A pesar que la violencia extrema ha aumentado en los lugares de trabajo, el gobierno de Trump ha abandonado una propuesta de OSHA - la agencia federal que se encarga de la salud y seguridad ocupacional - para establecer un estándar que reduzca la violencia en los lugares de trabajo.  

A pesar de estos hallazgos alarmantes, OSHA continúa enfrentando una desesperada escasez de recursos. Responsable por regular nueve millones de lugares de trabajo, los 764 inspectores federales necesitarían 158 años para visitar al menos una vez cada sitio. Aun así, este gobierno continúa imponiendo una agenda agresiva de desregulación, recortando medidas de seguridad y proponiendo grandes recortes a programas de entrenamiento necesarios para la salud y la seguridad de los trabajadores.

Contacto: Gonzalo Salvador (202) 637-5018